William Falkner (William Cuthbert Falkner, 25 de septiembre de 1897 – 6 de julio de 1962) fue un escritor estadounidense, uno de los más importantes del siglo XX y sobre todo de la gran tradición literaria del sur norteamericano.
Escribió novelas, cuentos, una obra de teatro, poemas, ensayos y guiones cinematográficos. Sin embargo, es más conocido por sus novelas, todas las cuales tienen lugar en el universo literario del condado ficticio de Yoknapatawpha, Mississippi (Yoknapatawpha County), que creó el autor.
Aunque comenzó a publicar sus obras en la década de 1920, se hizo famoso cuando ganó el Premio Nobel de Literatura en 1949. Con el dinero del Premio, creó la Fundación William Faulkner, que otorgaba becas a destacados jóvenes escritores estadounidenses.
Literatura y premios
Usando el Sur como su inspiración y escenario, Faulkner escribió una serie de novelas e historias que reflejan verdades y condiciones humanas universales; ganó el Premio Nobel de Literatura en 1951 y es considerado uno de los más grandes novelistas estadounidenses.
Casi todas sus obras han ganado premios, siendo el más importante los dos Pulitzer que ganó en 1954 y 1962, con sus novelas «Una fábula» (A Fable)y «Los rateros» (The Reivers) respectivamente. También ha sido honrado con el Premio Nacional del Libro de EE. UU. (National Book Award). Su novela «El ruido y la furia» (The Sound and the Fury) fue incluida entre las 100 obras maestras de la literatura en inglés del siglo XX. Pero también sus novelas «Luz de agosto», «Mientras sangro» y «¡Absalón, Absalón!» han sido incluidos en listas similares.
En 1962 fue galardonado con la «Medalla de Oro de la Literatura» de la Academia Estadounidense de Letras y Artes. En su honor se ha instituido el importante Premio PEN/Faulkner.
Faulkner como escritor
Como escritor, Faulkner se destacó en varias áreas: era experto en la creación de personajes y el desarrollo de la trama; su dominio técnico se estableció temprano e hizo que su método narrativo fuera tan importante e interesante como su contenido. Era igualmente hábil para relatar eventos dramáticos y apasionados y para tejer el humor de cuentos fantásticos de la literatura americana fronteriza.
El mayor regalo de Faulkner y su mayor logro fue su uso del lenguaje, particularmente una retórica poderosa e hipnótica. Más que cualquier otro escritor estadounidense del siglo XX, exploró y explotó la amplia gama y variedad del inglés estadounidense en todas sus formas, características, dialectos y tonos, y a través del lenguaje elaboró una serie de obras que perdurarán por mucho tiempo y han sido materia de estímulo para cientos de escritores posteriores.
